Poema de Vicenta Agulló publicado en El Crisol nº 45 diciembre-enero 2009/10.
Homenaje a la poeta Conchi Izquierdo
Me dicen que hay una joven
es poeta enamorada
va persiguiendo la brisa
que ameniza mi velada
Quedo dormida y despierto
y en mi nube escarlata
hay un nido de poetas
que me inundan hasta el alma
Se reúnen en el cielo
y por los mares se escapan
llevando por estandarte
grandezas ilicitanas
Recitan al aire libre
les espía la luna clara
va creciendo esa joven
entre espigas y granadas
Un certamen de poesía
da calor a su garganta
y la joven ilicitana
ya por fin su luz alcanza
Hay infinidad de estrellas
cual briznas de hierba gualda
que surcan por Torrellano
con su voz entrelazada
Miran a la joven de aquí
en la nube escarlata
llevando a los corazones
alimento para el alma
Así transcurren los años
como briznas calladas
que van sembrando el terruño
bajo el sol de la esperanza
Hay un mensaje en su legado
que lira de luna blanca
que va dejando el recuerdo
nuestra poeta Conchi Izquierdo
Homenaje a la poeta Conchi Izquierdo
Me dicen que hay una joven
es poeta enamorada
va persiguiendo la brisa
que ameniza mi velada
Quedo dormida y despierto
y en mi nube escarlata
hay un nido de poetas
que me inundan hasta el alma
Se reúnen en el cielo
y por los mares se escapan
llevando por estandarte
grandezas ilicitanas
Recitan al aire libre
les espía la luna clara
va creciendo esa joven
entre espigas y granadas
Un certamen de poesía
da calor a su garganta
y la joven ilicitana
ya por fin su luz alcanza
Hay infinidad de estrellas
cual briznas de hierba gualda
que surcan por Torrellano
con su voz entrelazada
Miran a la joven de aquí
en la nube escarlata
llevando a los corazones
alimento para el alma
Así transcurren los años
como briznas calladas
que van sembrando el terruño
bajo el sol de la esperanza
Hay un mensaje en su legado
que lira de luna blanca
que va dejando el recuerdo
nuestra poeta Conchi Izquierdo
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